AddThis Compartir BottonsShare a FacebookFacefacebookShare a TwitterTwitterTwittershare a PinterestPinterestPinterestshare a Moreaddthismore1
Los accidentes cerebrovasculares ocurren no solo en las personas, sino también en los animales. Esto sucederá cuando hay interrupción del flujo sanguíneo al cerebro, lo que lleva al daño celular y la muerte celular. Los síntomas generalmente se presentan de manera aguda, y pueden incluir parálisis repentina de las piernas, así como la debilidad de los nervios craneales, lo que resulta en caídas faciales y la pérdida de otros reflejos. Las causas de un accidente cerebrovascular incluyen presión arterial alta, exposición a toxinas, trauma, cáncer, así como en ocasiones microbios virales y bacterianos. En la gran mayoría de los casos no se encuentra una causa definitiva.
El diagnóstico presuntivo de un accidente cerebrovascular se realiza descartando otras causas de síntomas neurológicos repentinos. Sin embargo, el diagnóstico definitivo de accidente cerebrovascular solo es posible a través de pruebas neurológicas, como una prueba de resonancia magnética realizada en una instalación veterinaria de referencia. El tratamiento del accidente cerebrovascular es principalmente de apoyo e incluye fluidos intravenosos, así como antibióticos para evitar infecciones secundarias, así como agentes antiinflamatorios. El pronóstico para el retorno a la función siempre se protege y depende de la gravedad de los síntomas.